¿Qué son las hemorroides?

Cada uno de nosotros tiene venas alrededor del ano que tienden a expandirse bajo presión. Cuando estas venas se inflaman y abultan, se conocen como hemorroides (también llamadas almorranas). Un conjunto de venas se encuentra en el interior del recto (hemorroides internas) y otro bajo la piel que rodea el ano (hemorroides externas).

Se considera que el tejido hemorroidal sirve para sostener las heces mientras descansamos y también sirven como amortiguador para los músculos durante los movimientos intestinales.

La hinchazón puede ser causada por el esfuerzo para mover los intestinos, por sentarse demasiado tiempo en el inodoro o por otras causas, como el embarazo, la obesidad o una enfermedad hepática.

Hemorrhoids

¿Qué tan comunes son las hemorroides?

Padecer de hemorroides es muy común entre hombres y mujeres. Alrededor de los 50 años casi la mitad de las personas tienen hemorroides observables. Muchas personas tienen sangrado ocasional a causa de las hemorroides.

Los problemas de hemorroides en las mujeres pueden comenzar durante el embarazo. La presión que ejerce el feto en el vientre, así como los cambios hormonales, hacen que las venas hemorroidales se inflamen. Estas venas también se ven sometidas a intensa presión durante el parto. Para la mayoría de las mujeres esas hemorroides no duran demasiado tiempo.

Las hemorroides son más frecuentes en las personas obesas.

Síntomas de las hemorroides

Hemorroides internas

  • A menudo causan una hemorragia rectal indolora.
  • Causan sangre roja brillante en las heces, en el papel higiénico o en la taza del baño.
  • La hemorragia se produce cuando las venas hinchadas se rascan o se rompen por el esfuerzo o el roce.
  • Los medicamentos que diluyen la sangre pueden empeorar las hemorragias.
  • Una hemorroide interna puede venir a través del ano, hincharse y doler.

Hemorroides externas

  • Causan dolor y molestias alrededor del ano.
  • Causan una hinchazón dolorosa o un bulto duro alrededor del ano. Esto sucede cuando se forma un coágulo de sangre.

El ciclo de los síntomas

La inflamación alrededor del ano puede causar sangrado y/o prurito (o comezón) que puede dar inicio a un ciclo intenso de síntomas. La eliminación de moco o residuos de heces pueden causar prurito o comezón. Esto puede ser causado por exceso de frotación o de limpieza alrededor del ano o por falta de buenos hábitos higiénicos al quedar residuos de heces alrededor del ano.
¿Sabía usted?

Cuando muchas personas piensan en las hemorroides, a menudo hablan de las hemorroides externas, pero también hay hemorroides internas, o fisuras anales (movimientos intestinales dolorosos debido a pequeños cortes en el ano) y otras condiciones anales menos comunes, que pueden causar sangrado, dolor y prurito o comezón alrededor del ano.

Hable con su médico si no mejora después de aplicarse productos de venta libre (sin receta médica).

Tratamiento de las hemorroides

Si no es posible eliminar las hemorroides o si observa que hay sangre en las heces consulte a su médico de inmediato.

El médico puede:

  • Revisar el ano y sentir el interior del recto con un dedo enguantado.
  • Colocar una pequeña herramienta en el recto para ver las hemorroides. Esto se llama anoscopía.
  • Observar el canal anal y el colon con un endoscopio flexible (colonoscopia o sigmoidoscopia). Esto es necesario cuando las hemorroides internas no pueden sentirse con un dedo.

Más fibra

Las heces blandas hacen más frecuentes los movimientos intestinales y reducen la presión en las venas. Es posible que deba aumentar el contenido de fibra en su dieta.

Consumir más frutas frescas, vegetales verdes, y granos integrales (especialmente consumir salvado)

Beber entre seis y ocho vasos del líquido diariamente (exceptuando bebidas alcohólicas).

Posiblemente el médico le puede sugerir utilizar un suplemento que le proporcione más fibra para ablandar las heces.

Buena higiene

Una limpieza adecuada después de los movimientos intestinales puede ayudar a tratar y prevenir las hemorroides.

  • Lave el ano suavemente después de cada evacuación usando papel higiénico suave y húmedo.
  • Evite limpiar mucho. Si es necesario puede darse un baño o una ducha el lugar de limpiarse.
  • Después del baño, seque el ano suavemente con un paño suave o una toalla.

Para protegerse de la irritación, limpie suavemente el área anal y aplíquese una pasta (o crema) de óxido de cinc en el área.

Puede encontrar supositorios o cremas medicinales en la farmacia, pero están pensados sobre todo para las hemorroides externas.

También puede utilizar compresas frías, un baño de tina, baños de asiento en agua tibia y reposar en la cama también le puede ayudar a calmar el dolor o la inflamación.

Cualquiera de estos tratamientos caseros le puede ayudar a aliviar los síntomas y es posible que no necesite más tratamientos. Si los síntomas persisten, consulte a su médico.

Tratamientos procedimentales

En algunos casos, es necesario extirpar las hemorroides internas que se han salido del ano (prolapsadas) o que tienen un sangrado excesivo. El gastroenterólogo puede extirparlas durante una visita a la clínica médica o en un hospital.

Se pueden usar muchos métodos para eliminar o reducir el número de hemorroides. Consulte con su médico acerca de la recuperación y cuál es la mejor opción para usted.

Durante la endoscopía el gastroenterólogo utiliza un tubo flexible, largo, delgado (como del grosor de su dedo meñique) que tiene una cámara diminuta en el extremo para observar su organismo por dentro y para introducir instrumentos médicos.

Los métodos endoscópicos utilizan luz infrarroja, congelación, electricidad o rayos láser para eliminar el tejido hemorroidal.

Se coloca una banda elástica alrededor de la base de las hemorroides, lo cual corta el flujo de sangre y la hemorroide se desvanece en unos cuantos días. Esta técnica se utiliza solamente para hemorroides internas
Con este método, se inserta una sustancia química alrededor de la vena para reducir el tamaño de la hemorroide.
A veces se sugiere la extirpación de las hemorroides (hemorroidectomía), pero conlleva una dolorosa recuperación.

Cómo prevenir las hemorroides

Evacúe las heces fecales tan pronto como sienta la necesidad.

Trate de no hacer fuerzas excesivas para expulsar las heces.

Lleve un ritmo de vida activo. Muévase, camine y ejercite su cuerpo para ayudar a la circulación de las heces fecales.

Mantenga una alimentación con suficiente fibra y beba suficientes líquidos para evacuar el intestino con regularidad. Agregue fibra a la dieta ayuda a que las heces sean más blandas y fáciles de evacuar.